¿Qué implica evaluar la formación?

Como se explicó en el contexto, es necesario conocer el grado en que los programas de formación contribuyen a alcanzar objetivos relativos al empleo y la mejora de las condiciones sociales y económicas de las personas, las empresas y la sociedad en su conjunto.

La OIT plantea que “teniendo en cuenta la importancia de los mecanismos y los procesos, su eficacia se debería evaluar en función de los resultados. El establecimiento de indicadores cualitativos y cuantitativos destinados a evaluar la consecución de los objetivos en materia de educación y capacitación, en consonancia con el Programa de Trabajo Decente, es apropiado para llegar a una comprensión común de los logros, las deficiencias y las enseñanzas extraídas”.21

Las intervenciones para la formación y el desarrollo de competencias suelen incluir evaluaciones de la  satisfacción  o del aprendizaje alcanzado.  Sin embargo, los resultados y  efectos, directos e indirectos, se evalúan con menor frecuencia, aún cuando los responsables de la implementación, las empresas y los propios participantes, están cada vez más interesados  en conocerlos.

Se proponen cinco niveles  en la evaluación de las acciones formativas22. Se ha incluido un quinto nivel, el enfoque del retorno de la inversión23, complementario de la evaluación de impacto.

Estos diferentes niveles deben considerarse  como un sistema, ya que entre ellos hay una relación causal y secuencial24.

Nivel de evaluación ¿Qué se evalúa? ¿Cómo se obtiene la información?

1 Reacción o satisfacción de los participantes.

Es la primera etapa de una formación  efectiva.

 

Se valora parcialmente el diseño y particularmente el proceso y los recursos utilizados, desde la perspectiva del participante.

Busca indagar cómo reaccionan los participantes frente a la formación: cómo valoran la pertinencia de los contenidos, el desempeño de los docentes, la organización, la metodología, el cumplimiento de los objetivos y otros aspectos generales de la intervención formativa.

Generalmente utiliza cuestionarios que responden los participantes al finalizar la acción formativa. También pueden implementarse otras técnicas, como grupos de trabajo, o entrevistas en profundidad. La utilización de cuestionarios de satisfacción se encuentra estandarizada en la mayoría de las entidades formativas.

2 Aprendizaje

Se valoran los primeros resultados de la formación que, en muchas ocasiones,  constituyen por sí mismos el objetivo principal de las actividades formativas. Si el participante no ha  aprendido, no se podrá avanzar en los siguientes niveles.

Busca conocer la eficacia de la acción formativa a la hora de desarrollar las competencias  de los participantes. Responden a este nivel las pruebas de evaluación, cada vez, en mayor medida, ligados a la demostración, por diferentes medios, de la adquisición de una determinada competencia

La evaluación de este nivel se realiza mediante instrumentos de evaluación del aprendizaje, por ejemplo: test, observación del desempeño, portafolio de evidencias, u otras modalidades adecuadas al tipo de competencia a evaluar.

3 Transferencia o aplicación

Supone avanzar un paso más en el conocimiento de los efectos de la formación; además de los cambios en las competencias de las personas, se busca valorar hasta qué punto esta formación está siendo aplicada en los entornos de trabajo.

Aunque la formación se haya desarrollado correctamente puede pasar que  los aprendizajes no se pongan en práctica por diferentes  razones. Además de constatar si el aprendizaje se transfiere al desempeño laboral, la evaluación  identifica los factores que incidieron en la transferencia. Constituye un paso más en la comprobación de los cambios que genera la formación.

Generalmente se aplican cuestionarios o se realizan consultas a los participantes y a quienes los supervisan directamente.

 

Es en el ámbito de las empresas donde se encuentra más extendido este nivel de  evaluación.

4 Impacto

 Este nivel es el que nos ocupa en esta Guía; la traducción de los resultados de la formación en impactos. En este nivel se sitúa la valoración de la relación “causa-efecto”.

Busca verificar el logro de  los objetivos de formación con diferente alcance de acuerdo al tipo de intervención. Puede tratarse de impactos que haya generado la acción formativa en  el resultado del trabajo de las personas, los resultados organizacionales o la  sociedad en su conjunto.

Definir indicadores que sean confiables, que se puedan medir,  sencillos y válidos.   También es necesario investigar los impactos de carácter cualitativo que la formación ha generado. Las metodologías para la obtención de la información son variadas y se desarrollan en el eje 4.

5 Retorno de la inversión (ROI)

Este nivel implica asignar valores económicos a los impactos para calcular la rentabilidad de la inversión que se realizó para llevar a cabo la formación.

Compara los costos de la inversión realizada con el valor de los beneficios obtenidos, en términos monetarios.

Se vinculan los resultados con los costos   para calcular la rentabilidad. Se deben considerar  los costos de realizar la formación y también pueden considerarse los costos de no hacerlo.

En el anexo 1 se incluye un ejemplo de aplicación.

 

 

21  Conclusiones sobre las calificaciones para la mejora de la productividad, el crecimiento del empleo y el desarrollo. OIT. CIT, 97ª reunión, Ginebra, 2008.

22  Basado en D. Kirkpatrick. Evaluación de acciones formativas. Barcelona. 2004.

23  ROI de sus siglas en inglés (Return on investment). Pulliam, P., Phillips, J., Fundamentos del ROI, Barcelona: 2007.

24  Ibid